lunes, 19 de mayo de 2014

Ya está aquí la levantera


Foto: J. A. Muriel


La luna preñada de Tarifa se desliza sobre un levante salado y brutal; un levante animal que aúlla a través de las rendijas.
Un viento insomne, desatado e insaciable ulula por las solitarias esquinas, al tiempo que riza las olas mestizas del Estrecho en esta extraña madrugada de Mayo.

No quiero estar en otro lugar.
No cambio por nada el placer de oír el incesante y milenario gemido del aire arañando puertas y ventanas.
Mientras la mágica luz primigenia de la luna mece la cuna donde se agita el viento, me detengo en el vértice mínimo del tiempo, y por un instante, una décima eterna de segundo, puedo sentir que este viento nativo no va solo.
Cuando despierta y se despereza en su cueva invisible, con el primer soplo, comienza la brisa que anuncia el carnaval. A medida que se encabrita van despertándose todos los fantasmas que en vida poblaron este trozo de tierra y sus alrededores.
Un cortejo de proporciones tremendas, una fiesta espectacular de disfraces, se va extendiendo desde más atrás de ¨ Yazira Tarif ¨ hasta más allá de  ¨Baelo Claudia¨.
A la vez que oigo los matices de la melodía salvaje del viento, creo escuchar en las voces soterradas de sus antiguos habitantes, los cánticos que precedieron a nuestras canciones de hoy.
Fusión y amalgama de civilizaciones y razas luchando entre sí por este trozo de tierra.
A veces pienso que no es el viento quien las agita, sino que es al revés: son las almas sin pena, las que decidieron quedarse en este lugar privilegiado de luz cambiante y playas inmensas, las que embaucan al viento y lo utilizan como un instrumento para decirnos que éste es su territorio.

No, no estaría en otro sitio mejor que aquí, donde la hipnótica y postiza luz de la luna acaricia lentamente el lomo de un levante irascible y poderoso. No lo estaría.


Pd: En Tarifa (donde por cierto, no se cae ni  una teja), cuando viene el Levante, se puede oír a cualquiera decir: ¨ ya está aquí la levantera ¨.

Dedicado a Marian y Henri.







1 comentario:

Esta canción está en dos discos colectivos, con arreglos diferentes, bajo una magnífica producción de Paco Ortega: ¨Secuestrados y Malditos¨...